EL
CAMBIO ESTÁ, EN EL QUE LO DESEA
La mayoría de la gente muere sin salir del pensamiento minimista de los últimos siglos, mientras unas pocas personas se enriquecen, el
resto del mundo vive en el pensamiento del humano como máquina y no como ser pensante,
cada día el hombre deja de ser Homo sapiens y se convierte en una herramienta
de unos cuantos.
Desde los colegios, los humanos son educados para acatar
órdenes, como siéntese, no salga del salón, abra el cuaderno, etc… sin
enseñarles la realidad, además son mecanizados para ser simplemente, herramientas de unos cuantos.
La gente que sale del pensamiento minimista es
condenada al rechazo de la sociedad, ya que son discriminados y considerados raros,
pero en realidad son personas que quieren progresar, pensar y se hacen tres
grandes preguntas, la primera es “¿quién
soy yo?”, la segunda es “¿para qué existo?” y la tercera es “¿cómo voy a vivir?”,
todo enfocado en la idea que el hombre piensa y no es una máquina.
En la universidad le dan el golpe de gracia a las
personas que piensan y tienen sueños, ya que les terminan de destruir sus
ideas y además son tratadas como personas subversivas del conocimiento y del
progreso, pero en realidad son personas que quieren destruir el gran sistema económico,
que se basa en el enriquecimiento de unos cuantos, el consumismo y trabajo del
resto del mundo.
Los países subdesarrollados son los principales
pensadores minimistas ya que desde su inicio han sido educados para trabajar
y dejar de pensar, dejando a los países desarrollados con un mayor poder económico
y por consiguiente con menos pensadores minimistas.
Este es un llamado para las nuevas generaciones, para
que cambien este pensamiento minimista que lleva más de 500 años y que tanto
a agobiado a la humanidad, cambiemos nuestra realidad y salgamos de este
pensamiento mediocre, porque el futuro está en nuestras manos, además cambiemos
la educación de los colegios, para que en realidad enseñen a pensar y no a ser
unas máquinas.
Redactado por: ALBERT STEVEN FAJARDO LOZANO